Hace casi quince años que vengo trasteando con drones. Desde primeras versiones muy básicas basadas en placas estilo arduino, hasta soluciones comerciales como las de DJI, que rozan la excelencia.
Sólo necesitas trabajar en ellos unos meses, ver cómo se comportan y su potencial, para entender que van a ser un elemento a tener en cuenta en nuestras vidas tarde o temprano. Creo firmemente que el único motivo por el que no tenemos los cielos plagados de estos artefactos es porque legislar su funcionamiento es una verdadera pesadilla.
Evidentemente si yo, una persona random, puede verle este potencial, ejércitos (y agresores) de todo el mundo deben tener un máster a estas alturas de usos absolutamente demenciales para estos dispositivos.
Epirus, una compañía de tecnología en crecimiento, ha recibido un contrato por 66.1 millones de dólares del Departamento de Defensa de EE.UU. para desarrollar un sistema de defensa contra drones no tripulados. Este contrato fortalece la posición de las ondas de microondas de alta potencia como una solución efectiva para la defensa a corto alcance contra enjambres de drones no tripulados.
El sistema Leonidas de Epirus, que fue introducido en abril de 2022, demostró su letalidad contra una amplia gama de drones y sistemas electrónicos, y logró derrotar enjambres de drones en varios eventos de prueba patrocinados por el gobierno de EE.UU. Además, su enfoque innovador y basado en software permite su actualización y mejora a través de simples actualizaciones de software para adaptarse a los retos actuales y futuros.
Este contrato es un paso importante en la dirección correcta para conectar la innovación de la industria con los procesos convencionales de adquisición de tecnología de defensa. La capacidad de prototipado rápido de Epirus permite que la empresa se mueva a la velocidad de desarrollo de la tecnología comercial para equipar a los guerreros con sistemas de armas de vanguardia hoy para defenderse contra las amenazas de mañana.
Es importante destacar que este proyecto fue financiado en parte por el gobierno de EE.UU. y las opiniones y conclusiones contenidas en el mismo no deben ser interpretadas como representativas de las políticas oficiales del gobierno de EE.UU.
En resumen, con este contrato, la compañía Epirus se ha convertido en un importante jugador en el campo de la defensa contra drones no tripulados, brindando una solución innovadora y efectiva para hacer frente a una amenaza creciente y evolutiva.